Conceptos generales

Es común utilizar los términos fármaco, medicamento y droga de forma indistinta. Los medicamentos, son preparados farmacéuticos, que contienen principios activos y excipientes o coadyuvantes de formulación, los cuales se destinan para el tratamiento, alivio, diagnóstico o prevención de una enfermedad. Bajo este concepto, el efecto farmacológico se atribuye a los principios activos, también considerados como fármacos, en contraste con los excipientes, los cuales, en teoría, no generan modificaciones biológicas en el organismo, y su aporte se limita a la garantía de las características de estabilidad y preservación de las condiciones organolépticas, microbiológicas y de calidad, desde la perspectiva de un preparado farmacéutico.

Por su parte, el fármaco corresponde a la sustancia capaz de producir una modificación biológica a través de una acción química. Esta acción química se logra mediante la interacción con una molécula específica, la cual se denomina receptor. En la mayoría de las situaciones farmacológicas, el fármaco debe interaccionar con el receptor para desencadenar una acción química que se traduce en un efecto farmacológico.

El concepto de droga usualmente representa una connotación negativa, debido a que es utilizado para referirse a sustancias de uso recreativo (psicotrópicas); En Norteamérica, el término droga (drugs) se utiliza para referirse en general a medicamentos y a las otras sustancias (psicotrópicas).