Los servicios farmacéuticos y establecimientos farmacéuticos, ejercen un rol fundamental dentro del Sistema General de Seguridad Social en Salud, garantizando la disponibilidad de los medicamentos y dispositivos médicos requeridos para la atención en salud integral y oportuna. Para ello, se requiere de un relacionamiento con diversos actores que determinan la posibilidad de disponer de los productos necesarios para garantizar la operación adecuada.
Una cadena de suministro o abastecimiento es un conjunto de actividades involucradas entre sí, que permiten que las organizaciones dispongan de los recursos necesarios para llevar a cabo el desarrollo de un producto o servicio y que este cumpla el objetivo principal que es satisfacer las necesidades del cliente final. Esto va desde la adquisición de materias primas, su transformación, fabricación, transporte y venta o entrega al usuario o consumidor final.
En el caso de los servicios farmacéuticos y establecimientos farmacéuticos, la cadena de suministro incluye a los proveedores, transportadores, productores, distribuidores, entre otros. Los servicios y establecimientos farmacéuticos, tienen como objetivo común, garantizar la disponibilidad de medicamentos y dispositivos médicos necesarios para satisfacer necesidades en salud por parte de pacientes y comunidad en general, cada uno desde su alcance.
En síntesis, la cadena de suministro involucra todas las actividades y operaciones necesarias para que un servicio o producto logre llegar a los usuarios o clientes y cumpla su objetivo. Entender la cadena de abastecimiento es fundamental para establecer estrategias adecuadas que garanticen la adquisición de recursos necesarios.