Relaciones

Otra manera de saber cómo impactan nuestras emociones en nuestra vida es en la calidad de nuestras relaciones. Esto ocurre por nuestra propia experiencia de la emoción. 

Hay días en los que te levantas y estás frustrado o agobiado y piensas: “Hoy no quiero hablar con nadie”, otros días te levantas y estás de buen humor y piensas: “Quiero hablar con mis amigos o familiares, saludarlos, saber cómo están, hablar de nuevos proyectos, etc”. Lógicamente, esto afecta cómo interactúas con las personas en esos días. 

Además, lo interesante de las emociones es que al observar conscientemente el mundo que nos rodea, nos damos cuenta que las expresiones faciales de las personas, su lenguaje corporal y los tonos vocales son manifestaciones de su estado emocional. Conductualmente, las emociones afectan cómo nos relacionamos con los demás, enviando señales de aproximación o accesibilidad o señales de alejamiento.

Ejercicio

Durante los próximos ocho días, tómate un momento y piensa en las diferentes personas con las que trabajas y las personas con las que convives, escribe sus nombres y anota el primer sentimiento que te venga a la mente cuando piensas en esa persona. 

Pregúntate si ese sentimiento influye en la forma en que tratas a esa persona, en la forma en que la saludas, en la forma en que interactúas con ella. 

El propósito de este ejercicio es crear una mayor conciencia de la calidad de nuestras relaciones, así como el rol de nuestras emociones en esta dinámica.